Alejo García Sierra
Al asumir el poder en Alemania Adolfo Hitler en 1933, comenzó la discriminación nazi contra los judíos. Algunos historiadores califican a esa fecha como el inicio del Holocausto. El mismo consistió en la persecución y el asesinato sistemático de aproximadamente seis millones de judíos europeos, organizado y auspiciado por el régimen sanguinario nazi y sus colaboradores, con una duración gradual entre 1933-1945. Finalizada la Primera Guerra Mundial (1914-1918), Alemania había padecido una plena derrota frente a un conjunto de países aliados, además de humillada y sometida a serias condiciones económicas. El antisemitismo fue la base esencial del Holocausto, igualmente el odio y los prejuicios contra los hebreos constituyeron los principios esenciales de la ideología nazi. La persecución a los israelitas evolucionó y con el tiempo se volvió más radical en el periodo de 1935- 1945 y culminó con la matanza de varios millones de ellos en países europeos.
Frente a las adversidades sufridas por Alemania, apareció en escena Adolfo Hitler, quién soportó muchas penurias en su niñez y Juventud. Desde un principio adoptó una posición agresiva y de desquite por lo sufrido a su patria en la confrontación mundial. Después de varios años una cruenta lucha política y emplear una campaña hostil contra sus adversarios y empresarios poderosos, el Fuher (Adolfo Hitler) asumió el cargo de la Cancillería de Alemania el 30 de enero de 1935. Al aceptar el poder inició una drástica, diabólica y transgresora revolución. A partir de entonces un conjunto de acciones tales como: al observar que el Partido Comunista tenía serios problemas internos, decidió excluir a los socialdemócratas de la escena política, obtuvo del parlamento (Reichstgs) plenos derechos para gobernar, creó un único partido en su país, El Nacionalisocialista, formó e instaló las brigadas armadas de choque SS (camisas negras) y SA (camisas pardas), comenzó una lucha frontal en perjuicio de los grandes capitalistas, concentró todos los poderes en sus manos con el propósito de destruir a los judíos y a otros conjuntos sociales, los cuales consideraba una amenaza grave para la comunidad racial alemana. En ese sentido, creía a sus compatriotas una raza superior y a los judíos un linaje inferior.
En el desarrollo de la Segundo Guerra Mundial (1939- 1945), los alemanes eliminaron a los Judaicos mediante diferentes métodos de persecución y ejecución, tales como: campos de concentración, fusilamientos, trabajos forzados, hambre, empleo de gases tóxicos en hornos, grandes caminatas, torturas y otras atrocidades.
En 1920 los nazis dieron a conocer un programa del partido donde anunciaron segregar a los judíos de le sociedad aria y abolir sus derechos políticos, legales y civiles. Para tal fin, aprobaron la Ley de Restauración de la Administración Pública el 7 de abril de 1923, donde se excluía a los funcionarios semitas y se limitaba el ingreso de alumnos de esa raza a los Institutos Educativos. Años más tarde el régimen ultraderechista nazi dificultó por completo el ingreso de ellos al sistema educativo.
Casi al concluir la Segunda Guerra Mundial los germanos comenzaron la liberación de los prisioneros de los campos de concentración y así como de otros lugares de reclusión, hasta el 7 de mayo de 1945 al finalizar esa acción bélica mundial. En 1945 las autoridades de esos países liberaron el campo de concentración Auschwitz-Birkenau, catalogado el más cruel, sanguinario, temible y grande de los centros de exterminio nazi.
Para resaltar y ser solidaria a esa fecha transcendental y memorable, la Asamblea General de las Naciones Unidos, de acuerdo a la Resolución 60/7 designó el 27 de enero como El Día Internacional de Conmemoración en Memoria de las Víctimas del Holocausto. En tal sentido expresó: “Recordación del Holocausto, educar para un futuro mejor”. “El tema pone de refiere el hecho de que la educación sobre El Holocausto tiene una dimensión universal y puede ser un foro adecuado para fomentar el respeto de los Derechos Humanos, aumentar la tolerancia y defender nuestra humanidad común. El Holocausto constituyó un momento histórico decisivo del que es posible extraer valiosas lecciones hoy acerca del peligro del extremismo y la prevención del genocidio”. Organización de las Naciones Unidas.
Conmemoremos El Día Internacional de Conmemoración de las Víctimas del Holocausto y pidámosle al Todopoderoso nos evite padecer este aterrador suceso llevado a cabo por un gobernante totalitario, sanguinario, despiadado y aferrado al poder sin contemplaciones. Asimismo, aspiramos que no aparezca un personaje malhechor come Hitler, responsable de un sinnúmero de delitos en el ejercicio de un poder abusador de la justicia.